¿Qué es la saturación del oxígeno?
La sangre en nuestro cuerpo transporta el oxígeno desde nuestros pulmones a todas las partes del cuerpo. Nuestra sangre se compone en su mayoría de agua. La manera más simple de transportar el oxígeno a través de un fluido es sencillamente disolver el oxígeno en el fluido de la misma forma en que el azúcar o la sal pueden disolverse en agua. Sin embargo, ya que los seres humanos somos criaturas activas con altas demandas metabólicas, no es posible disolver suficiente oxígeno en nuestro cuerpo para cumplir con nuestras necesidades. Por lo tanto, nuestros cuerpos han desarrollado un método para aumentar la capacidad de transporte de oxígeno en la sangre. Este ingenioso método utiliza una molécula especial llamada hemoglobina. Cada molécula de hemoglobina se compone por cuatro unidades de hemo separadas, y cada unidad hemo requiere de un solo átomo de hierro. Una molécula completa de hemoglobina puede transportar cuatro moléculas de oxígeno, una en cada grupo hemo. El hierro produce un color rojo en la molécula de hemoglobina, de la misma forma en que la tierra o las rocas adquieren una tonalidad rojiza por la presencia de hierro. La hemoglobina en nuestra sangre no flota libremente en nuestro torrente sanguíneo, sino que está envuelta dentro de células. El color rojo de la hemoglobina les da un color rojizo a las células, por lo que se les llama glóbulos rojos. Los glóbulos rojos están suspendidos en la base acuosa de la sangre que se le conoce como plasma, este que contiene muchos otros tipos de células, proteínas y electrolitos disueltos en él. Si todos los glóbulos rojos se eliminaran de la sangre, el resto del plasma ya no sería rojo, sería simplemente un fluido de color claro a pajizo.
El color rojo
Cada molécula de hemoglobina transporta cuatro átomos de oxígeno que a su vez están unidos a átomos de hierro en los grupos hemo. Cuando un átomo de oxígeno se une a un átomo de hierro en el grupo hemo, éste cambia el color del átomo de hierro de rojo oscuro a rojo brillante. A esto se debe que la sangre oxigenada es de rojo brillante. La sangre carente de oxígeno es de rojo oscuro. Al ver la sangre rojo oscuro a través de las capas de la piel, la cual actúa como un filtro de color rosa, esta adquiere una apariencia azulada. Debido a lo anterior es que a veces podemos ver que las venas bajo nuestra piel tienen una apariencia azulada, por lo mismo es que en los libros o manuales, la sangre desoxigenada se representa como azul y la oxigenada como roja.
Monitores de oxígeno en sangre
Uno se puede realizar un análisis de sangre para saber cuánto oxígeno está transportando la sangre. Este análisis se llama análisis de gases de la sangre arterial. Sin embargo, este consiste en tomar una muestra actual de sangre de una arteria con una aguja conectada a una jeringa. Si bien es posible hacerlo y está ampliamente disponible en instituciones médicas, es incómodo y puede realizarse de vez en cuando. Una manera más fácil de medir la cantidad de oxígeno en la sangre que no requiere tomar muestras de sangre es hacer uso de las propiedades de cambio de color de la molécula de hemoglobina. Sabemos que una molécula de hemoglobina completamente saturada con las cuatro moléculas de oxígeno tendrá un color rojo brillante, y una molécula de hemoglobina que no contiene oxígeno tendrá un color mucho más oscuro, es por esto que podemos sencillamente crear un dispositivo que mida cuánta luz es reflejada desde las moléculas de hemoglobina en nuestro cuerpo. Si toda la luz tiene un rojo brillante, entonces sabemos que la hemoglobina está saturada de oxígeno. Mientras más oscuro sea el color, más vacías están las moléculas de hemoglobina. Podemos expresar esto como un simple porcentaje, el 100% sería con una luz roja brillante, lo que significaría que todas las moléculas de hemoglobina están saturadas de oxígeno; 0% sería con rojo oscuro, lo que se traduciría en que las moléculas de hemoglobina no contienen oxígeno.
Este número se llama porcentaje de saturación de oxígeno, a menudo abreviado SpO2. Y este dispositivo se llama monitor SpO2 o monitor de saturación de oxígeno en sangre. Hoy en día, la mayoría de los monitores de saturación de O2 como este, también miden el pulso. La combinación del monitor de saturación pulso – oxígeno a menudo se llama oxímetro de pulso o pulsioxímetro. Estos monitores de oxígeno en sangre funcionan al hacer brillar una pequeña luz a través de nuestro cuerpo y medir la luz reflejada, usualmente en la punta de un dedo.
Monitoreo continuo
Otra ventaja del oxímetro de pulso por sobre un análisis de gases de la sangre arterial, es que este último es un control al azar que entrega una respuesta válida únicamente en el momento en que se tomó la muestra de sangre. En cambio, el medidor del oxímetro de pulso puede medir continuamente el porcentaje de saturación de oxígeno. La mayoría de los monitores oxígeno en sangre del tipo pinza tiene un modo automático donde se encienden automáticamente cuando coloca el dedo en la pinza, luego mostrarán el resultado por unos pocos segundos y se apagará automáticamente para conservar la energía de la batería. Actualmente, el CSMW funciona como un monitor de saturación de oxígeno puntual (aunque podría obtener una funcionalidad continua en el futuro). Debido a que la mayoría de los monitores SpO2 son de pinza para los dedos, no puede usar los dedos o la mano mientras el monitor está en su dedo. El CSMW le permite usar el monitor de oxígeno todo el día sin interferir con su mano o dedos. De esta manera, puede medir su propia SpO2 durante el día y cada vez que lo desee, donde quiera que esté, y cualquier cosa que esté haciendo.
¿Por qué medir la saturación de oxígeno?
Porque la cantidad de oxígeno en nuestro cuerpo es muy importante, nuestra saturación de oxígeno arterial normal es entre 95-100%. Diversas patologías pueden reducir la saturación de oxígeno en sangre, tales como insuficiencia cardíaca, enfermedad pulmonar crónica o apnea del sueño. Normalmente, cualquiera que tenga una saturación de oxígeno inferior a 89-90% requerirá oxígeno suplementario en el hogar para elevar los niveles de oxígeno en sangre a los 90. Si los niveles de oxígeno disminuyen a los 80 o 70 se producirán síntomas graves, incluyendo cambios visuales, mareos, cambios en el estado mental, falta de conciencia, problemas para pensar, y otros. Las saturaciones de oxígeno por debajo de eso durante tiempo prolongado, son mortales.
La insuficiencia cardíaca, enfermedad pulmonar crónica y la apnea del sueño pueden monitorearse siguiendo la saturación del oxígeno a lo largo del tiempo, así como midiendo otros parámetros disponibles en el CSMW, tales como la frecuencia del pulso y la frecuencia respiratoria. Juntas, estas medidas pueden ayudar a diagnosticar nuevos problemas, así como detectar exacerbaciones de estas enfermedades antes de que se agraven. Una cosa es poder comprobar la saturación de su oxígeno de vez en cuando con un oxímetro de pulso, si recuerda tomar la pinza de dedo y si recuerda ponérselo; pero otra muy distinta es tener la seguridad de saber que puede verificar su saturación en cualquier momento que lo desee sin ningún equipo adicional que no sea el reloj en su muñeca, y que la información pueda automáticamente enviarse a su médico personal para revisión.